martes, 18 de octubre de 2016

BRUNYOLS DE L'EMPORDÀ


Uno de los referentes culinarios de la Cuaresma son los buñuelos de viento, o como se conocen en l'Empordà, brunyols. Existen innumerables recetas, pero por fin una que ha dado resultado. Después de consultar diferentes medios…. y de probar unas cuantas veces,  he encontrado la combinación que me gusta y que me recuerda a los que comíamos cuando íbamos a Figueres. Sin duda son la mejor noticia cuando acaban los Carnavales!

Ingredientes
  • 200 g de masa madre 100% (100 de harina y 100 de agua)
  • 525 g harina de fuerza
  • 1 pizca de sal
  • 150 g azúcar 
  • 7 g de levadura fresca 
  • 150 ml leche
  • 15 g matalahúga (anís verde)
  • 1 rama de canela 
  • piel de 1 limón  
  • 4 huevos
  • 65 g de mantequilla
  • Preparación
    Refrescar la masa madre, cuando doble el volumen estará lista, dependiendo de la temperatura ambiente puede tardar entre 3 o más horas. Infusionar la leche con la matalahúga (anís verde) y la canela, dejar entibiar, colar y reservar. Mezclar la harina, el azúcar, la sal, la masa madre y la levadura fresca. Incorpor la leche y la ralladura de la  piel del limón, mezclar bien hasta conseguir una pasta fina. Dejar reposar unos 15 minutos e incorporar los huevos, uno a uno hasta que estén bien mezclados, seguidamente añadir la mantequilla, a temperatura ambiente, y en porciones pequeñas. Amasar hasta conseguir una masa fina y homogénea, hacer una bola y dejar que leve unas dos horas o hasta que doble el volumen.
  • na vez que haya levado, formar bolitas de masa, con las manos enharinadas o aceitadas ligeramente, para que no se nos pegue la masa. Dejar reposar las bolitas en una superficie enharinada y tapadas con un paño humedecido, fuera de las corrientes de aire unos 45 minutos. Preparar un bol con azúcar, para rebozar los brunyols y reservar.
  • Una vez empecemos el  proceso todo irá muy rápido, hay que darles forma, freír y rebozar , así que cuantas más manos mejor, en nuestro caso 4 manos, a ratos aun son pocas pues a demás hay que ir haciendo fotos. Calentar en una cazuela el aceite, cuando esté bien caliente ir tirando las bolitas de masa a las que habremos hecho un agujero en el centro con los dedos, con las manos aceitadas resulta muy fácil.
    Freír los brunyols por un lado hasta que estén bien tostados, entonces darle la vuelta para que se frían por el otro lado. 
    Rebozar los brunyols en el azúcar inmediatamente después de sacarlos del fuego. Retirar a una fuente o bandeja y dejar que se enfrien. Se pueden servir al gusto, pero acompañan muy bien con una copita de garnacha, moscatel o cualquier otro vino dulce. Si haces muchos, o te olvidas de ellos, y llegan a resecarse, son una estupenda base para un Budin de brunyols de l'Empordà

No hay comentarios:

Publicar un comentario